[vc_row type=»full_width_background» full_screen_row_position=»middle» column_margin=»default» column_direction=»default» column_direction_tablet=»default» column_direction_phone=»default» scene_position=»center» text_color=»dark» text_align=»left» row_border_radius=»none» row_border_radius_applies=»bg» overlay_strength=»0.3″ gradient_direction=»left_to_right» shape_divider_position=»bottom» bg_image_animation=»none»][vc_column column_padding=»no-extra-padding» column_padding_tablet=»inherit» column_padding_phone=»inherit» column_padding_position=»all» background_color_opacity=»1″ background_hover_color_opacity=»1″ column_shadow=»none» column_border_radius=»none» column_link_target=»_self» gradient_direction=»left_to_right» overlay_strength=»0.3″ width=»1/1″ tablet_width_inherit=»default» tablet_text_alignment=»default» phone_text_alignment=»default» column_border_width=»none» column_border_style=»solid» bg_image_animation=»none»][split_line_heading animation_type=»default»]
Tips para cuidar tu piel en el frío
[/split_line_heading][divider line_type=»Small Line» line_alignment=»default» line_thickness=»3″ divider_color=»extra-color-2″ animate=»yes» custom_height=»20″ custom_line_width=»100″ delay=»200″][divider line_type=»No Line»][/vc_column][/vc_row][vc_row type=»in_container» full_screen_row_position=»middle» column_margin=»default» column_direction=»default» column_direction_tablet=»default» column_direction_phone=»default» scene_position=»center» text_color=»dark» text_align=»left» row_border_radius=»none» row_border_radius_applies=»bg» overlay_strength=»0.3″ gradient_direction=»left_to_right» shape_divider_position=»bottom» bg_image_animation=»none»][vc_column column_padding=»no-extra-padding» column_padding_tablet=»inherit» column_padding_phone=»inherit» column_padding_position=»all» background_color_opacity=»1″ background_hover_color_opacity=»1″ column_shadow=»none» column_border_radius=»none» column_link_target=»_self» gradient_direction=»left_to_right» overlay_strength=»0.3″ width=»1/1″ tablet_width_inherit=»default» tablet_text_alignment=»default» phone_text_alignment=»default» column_border_width=»none» column_border_style=»solid» bg_image_animation=»none»][vc_column_text]Llega el invierno y el primer cambio que empiezas a notar es tu piel seca, áspera y con picor. ¿Sabes por qué? La piel se mantiene hidratada atrayendo la humedad del medio ambiente. Cuando los niveles de humedad disminuyen, la piel se deshidrata y se siente seca.Compartimos tips para que este invierno tengas la piel más suave que nunca.
- Pon atención a los productos que estés utilizando y su efecto: Los productos que utilizas durante los meses de verano pueden no ser igual de efectivos durante la temporada de invierno. Si utilizas una loción o gel, probablemente necesitarás cambiar a una crema hidratante más espesa. Solamente cambia tu humectante si notas un cambio en tu tipo de piel. Si sientes que tu tipo de piel ha sido consistente y todavía se siente grasosa, es posible que desees continuar usando una crema hidratante más ligera.
- No te bañes en agua caliente por mucho tiempo: Puede ser muy tentador, pero esas duchas calientes pueden eliminar los aceites esenciales de la piel. La mayoría de los médicos recomiendan que la temperatura se mantenga por debajo de los 110 grados. Si notas que tu piel enrojece mientras te bañas, es recomendado que bajes la temperatura.
- Compra un humidificador: Los humidificadores agregan humedad a los espacios cerrados. Esto ayudará a que tu piel retenga la humedad de forma natural.
- Los labios son igual de importantes que el rostro: Puedes utilizar remedios naturales como aceite de coco o aceite de almendras para labios agrietados. Por las noches utiliza bálsamos protectores y máscaras de labios para humectar mientras duermes. También
- Reservate un facial: Dermatólogos recomiendan un tratamiento facial profesional cada cuatro semanas durante el invierno, ya que es el tiempo que tarda la piel en recorrer el ciclo de vida completo del crecimiento de células de la piel. Estos te ayudan a mantener tu piel limpia, despejada e hidratada, siempre llevando un régimen diario de cuidado de piel. En Clínicas Esquivel recomendamos el procedimiento de Higiene con Microdermoabrasión, que se enfoca en eliminar esas células muertas y regenerar la piel, además hidratando el rostro.
- Y recuerda lo más importante de todo: ¡Mantente hidratado! Toma mucha agua para cuidar tu cuerpo y tu piel. Es de igual importancia tomar mucha agua en el invierno que en el verano.
Cuida todos estos aspectos para lucir radiante y no perderás el brillo este invierno.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
